El Santuario de Tenmangu juega un papel importante para la gente de Osaka. Más allá de ser el lugar de reunión para el Tenjin Matsuri, éste es un importante lugar de culto de Tenjin.
Con una arquitectura puramente japonesa, los edificios del Sumiyoshi Taisha hablan de una época cuando el budismo chino todavía no había influido el estilo japonés.
El Ohatsu Tenjin, también llamado Tsuyunoten, es uno de los santuarios más populares de Osaka. Un lugar con un pasado simbólico ligado a una dramática historia de amor.
Érase una vez un príncipe que seducido por una nueva religión, el budismo venido de China, la defendió con cuerpo y alma durante una guerra que sacudió al país.
Entre las permenentes luces de neón y el frenesí de la zona de Dotonbori se encuentra un callejón fuera del tiempo: el Hozen-ji Yokocho, guardián del alma de la vieja Osaka.