Henn na Hotel 変なホテル

Cuando llegues al hotel robótico Henn na Hotel no te sorprendas al ser recibida por un pequeño robot llamado Nao. Este androide creado por un Aldebarán robótico, una empresa francesa, es el conserje. El te da la bienvenida al hotel y te lleva a la recepción.

A partir de ahí, un sorprendente trío toma las riendas: un humanoide y dos dinosaurios robóticos explican cómo registrarse, mientras otro robot se encarga de tu equipaje y lo lleva directamente a tu habitación...

Aquí no hay que preocuparse si uno pierde la llave de la habitación pues las puertas se abren con un sistema reconocimiento facial. Después de pasar las pruebas de acceso, podrás relajarte en una de las 72 habitaciones. El hotel tiene planes de expandirse y tener 144 habitaciones.

En tu mesita de noche verás un pequeño robot en forma de tulipán. Se trata de Churi-chan quien será tu compañera durante la duración de su estadía. Ella puede encender o apagar las luces, revisar las predicciones del tiempo y activar el despertador ...

Los seres humanos están trabajando detrás de las cámaras. Ellos se enfocan en la seguridad y también hay algunos empleados responsables de cambiar las sábanas, una tarea demasiado fastidiosa para los robots. 

Eco-concepto

La experiencia en este hotel te hace girar la cabeza y a juro surge una pregunta: ¿es el Henn na Hotel simplemente un truco o un concepto innovador? Si lo examinas más en detalle te das cuenta de que este hotel no es sólo una idea divertida. El hotel es low-cost y ha sido diseñado para garantizar al cliente una habitación al mejor precio posible, respetando el medio ambiente.

Es por esto que todas las habitaciones están equipadas con un sistema de refrigeración radiante que regula la temperatura de forma más natural que una unidad de aire acondicionado estándar.

De manera más general, todo el sitio fue planeado para ser más económico y respetuoso con el medio ambiente. Desde la distribución de los edificios para optimizar el flujo de aire, pasando por el uso de ladrillo y la madera como material de construcción, hasta los paneles solares, el Henn na Hotel ha logrado reducir el consumo de energía en un 30% comparado con los hoteles convencionales. Los ahorros se reflejan en los precios de las habitaciones que empiezan a  9,000 yenes por persona, con desayuno incluido.

Cerca del hotel se puede disfrutar de las atracciones del parque Huis Ten Bosch. Este parque temático recrea el ambiente y el paisaje característico de los Países Bajos: casas de madera, flores, molinos de viento ... Este sitio es una muestra de la relación especial que los japoneses y los holandeses han mantenido desde el siglo XVII.