Odaiba お台場
Vista de la bahía de Tokio en un día soleado, Odaiba
Foto de Cem Ersozlu en Unsplash
Bahía de Tokio por la noche y del puente Rainbow Bridge, Odaiba
Foto de Jean Vella en Unsplash
Estatua de Unicorn Gundam, Odaiba
Foto de Hkyu Wu en Unsplash
El Rainbow Bridge de Tokio nunca ha estado tan a la altura de su nombre
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La sede de Fuji TV da testimonio de la arquitectura futurista de Odaiba
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Veinte mil leguas sobre el mar
Una isla artificial conquistada a las aguas del Océano Pacífico, el distrito futurista de Odaiba nació y creció bajo el signo del ocio.
A bordo del monorraíl Yurikamome, que sale de la estación de Shimbashi, el paso de una isla a la otra a través del puente Rainbow Bridge ofrece una impresionante vista de la bahía de Tokio. ¡Yōkoso (bienvenido) a Odaiba! Este desafío a la naturaleza surgió de las olas para cultivar un nuevo tipo de pueblo como un árbol de bambú en la década de 1990. Los entusiastas de la arquitectura no deben perderse la sede de Fuji Television, diseñada por Tange Kenzō (1913-2005). El edificio se reconoce desde lejos por su gigantesca esfera, una especie de nave espacial en equilibrio entre dos torres, que en realidad es una plataforma de observación.
Un sinfín de actividades, sinónimo de relax y entretenimiento, atraen a mucha gente el fin de semana. La playa de Odaiba con sus restaurantes, el onsen parque temático Ōedo-Onsen Monogatari, Tokyo Joypolis del fabricante de videojuegos Sega, el centro comercial Venus Fort, el Museo Nacional de las Ciencias Emergentes e Innovación (Miraikan) y muchos otros ofrecen placeres fugaces, como los deslumbrantes fuegos artificiales de la bahía de Tokio en agosto.
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